Vago viento
Acomodadas piedras
unidas en arcos,
como lomos al cielo,
el río pasa lento
a lo lejos,
es tarde del crepúsculo
y nada es definitivo,
ha llovido antes y persiste
la duda,
las ventanas elevan sus miradas
al vago viento,
en los besos de las suelas
se oye el susurro de las piedras,
en la angosta calle el aviso
de tu rostro ¡Complacencia!
y de tu voz siempre sonar,
sonar... sonar...
Abraham Guevara.
No hay comentarios:
Publicar un comentario